Recibe hoy de Dios el Padre, de Jesús y del Espíritu Santo la fuerza que necesitas para vencer al enemigo.

¡Hoy es un día de victoria para ti! Sí, porque:

- Dios el Padre te ama y cuida de ti

- Jesús se levanta de Su trono y lucha por ti

- Su Espíritu Santo te fortalece y te levanta

- Su Palabra te tranquiliza y da fe del enorme valor que tienes ante Sus ojos

Querido(a) amigo(a), eres un hijo/una hija de Dios. Ni lo pasado, ni lo presente, ni lo porvenir, ni los hombres, ni las circunstancias te podrán separar nunca del amor de tu Padre (mira Romanos 8:38-39).

Vas a resistir firmemente en la lucha frente a todo lo que quiera hacerte caer, ¡y vas a hacerlo anclado(a) sobre la roca, y con tus ojos puestos fijamente en Jesús! No en el problema, ¡sino en Jesús!

Querido(a) amigo(a), hoy resistes al enemigo, y debido a ello, él huye, se va, no hay sitio para él en tu vida.

Gracias por existir, 

Eric Célérier