Dios y mi adoración
Description
De todas las cosas que Satanás está tratando de robarle, la que está en la cumbre, es la alegría de la adoración. Si puede, lo mantendrá fuera de la Biblia; si no puede, tratará de hacer que la lectura de las Escrituras sea una tarea aburrida. Si puede, lo va a mantener fuera de la iglesia; si no puede, tratará de hacer que usted diga “me cansa” y “no quiero”. Lo va a distraer y lo va a desviar en la oración, pero si no puede interrumpir sus oraciones, va a tratar de hacer que su oración sea rutinaria y superficial.
Libérese de la influencia de Satanás. ¡Piense! Piense dos minutos en lo que nuestro Dios ha hecho: creó el inmenso, complejo y hermoso mundo . . . envió a Su Hijo a una muerte sangrienta para hacer el pago completo de toda la maldad humana . . . envió a Su buen Espíritu para cambiar nuestra mente y proclamar nuestra nueva identidad. ¿Qué se puede decir de todo eso, sino ¡Qué maravilla!? ¡Aleluya!
“Cantad alegres a Jehová, toda la tierra. Levantad la voz, aplaudid y cantad salmos. Cantad salmos a Jehová con arpa; con arpa y voz de cántico. Aclamad con trompetas y sonidos de bocina, delante del Rey, Jehová” (Salmo 98:4-6).
La palabra adoración viene del latín adoratio, compuesta de ad y orare, pedir, rogar, suplicar. En nuestro idioma tiene la connotación de reverenciar, rendir el culto debido a Dios, amarlo sobre todas las cosas, honrarlo, darle la gloria solo a Él, proclamar Su santo nombre. ¿Hay alguien que diga conmigo Amén?