Tu fe en Jesús es tu posesión más preciosa. No solo te abre las puertas del Cielo, sino que también te ayuda a triunfar frente a las dificultades en la Tierra.
Esta fue la respuesta que recibí un día de un lector de “Un Milagro Cada Día”: “Mi mayor frustración son mis dudas: me falta fe en las batallas...”. Si este es también tu caso hoy, mi querido(a) amigo(a), quiero alentarte por medio de este versículo de la Biblia, que dice: “Porque todo lo que es nacido de Dios vence al mundo; y ésta es la victoria que ha vencido al mundo, nuestra fe” (1 Juan 5:4).
¡Has nacido de Dios, querido(a) amigo(a)! Tu fe está en Él, y eso te permite salir victorioso(a) sobre tus dificultades, presentes y futuras. ¡Oro a Dios para que seas un vencedor en Cristo!
No termines este año oprimido por las dudas y los temores. Frente al temor y a la incertidumbre, declara con fe que Aquél al que amas, Dios, el Creador, está sustentando tu vida en Sus manos. ¡Y que todas las cosas, sí, todas las cosas, obran para tu bien! (Romanos 8:28).
Tu fe es un escudo (mira Efesios 6:16) que te fortalece para parar las flechas feroces que el enemigo lanza contra tu vida. Tu fe viene del oír la Palabra de Dios (mira Romanos 10:17). ¡Y es por ello que la Palabra nutre tu fe, y a través de ella mueves montañas! ¡Aleluya!
Querido(a) amigo(a), que puedas terminar este año fuerte en la fe, confiando en Dios.
Gracias por existir,
Eric Célérier
