“¡Cuán bienaventurado es el hombre que no anda en el consejo de los impíos!”, Salmo 1:1
La gente a menudo me ha preguntado, "¿Puede un cristiano alguna vez usar consejeros no cristianos, tales como abogados, médicos o contadores?" Creo que la respuesta a esa pregunta está en el versículo bíblico de hoy.
La Palabra de Dios nos enseña que debemos buscar nuestros consejos de otros hombres y mujeres cristianos y piadosas que entienden y tratan de obedecer la Palabra de Dios.
Por ejemplo, si vas a elegir un médico, además de ser experto en la especialidad de medicina profesional, quieres saber que la persona que va a cuidar de ti tiene la sabiduría de Dios.
Ahora, si tienes un consejero no cristiano (doctor, dentista, abogado), la Palabra de Dios enseña que no debes deshacerte de esa persona. Eso puede ser un mal testimonio hacia una persona no salva. Tal vez Dios te puso a esa persona en el camino con el fin de que lo conduzcas a Él. Si estos consejeros han sido prudentes, éticos y honestos, sigue con ellos.
Aconsejé a un hombre de negocios cristiano que tenía a un contador y a un abogado que no eran cristianos. Durante unos 10 años, este empresario había estado haciendo prácticas poco éticas y honestas con el apoyo de su contador con el fin de ahorrar en impuestos. Su abogado impidió que él fuese descubierto.
A medida que la relación de este hombre con Dios creció, se hizo evidente que no podía continuar con estas prácticas comerciales. Tuvo que parar las prácticas deshonestas y hacer restitución. El contador y el abogado renunciaron; desde ese entonces ha hecho restitución y ahora tiene consejeros cristianos.
Lea el versículo de hoy otra vez. ¿Es necesario realizar algún cambio en tu propia vida?
Lectura Bíblica Diaria:
Proverbios 7-9
