“Estén alerta y oren para que no caigan en tentación. El espíritu está dispuesto, pero el cuerpo es débil».” – Mateo 26:41 RVR1960
“Los que confían en el Señor son como el monte Sión, que jamás será conmovido, que permanecerá para siempre. Como rodean las colinas a Jerusalén, así rodea el Señor a su pueblo, desde ahora y para siempre.” – Salmo 125: 1 – 2 NVI
“Por lo tanto, mis queridos hermanos, manténganse firmes e inconmovibles, progresando siempre en la obra del Señor, conscientes de que su trabajo en el Señor no es en vano.” – 1 Corintios 15: 58 NVI
Después de escuchar el devocional, medita en los siguientes puntos:
Esta mañana me levanté pensando...
… en que hay momentos donde sabemos que no podremos lograr nuestro objetivo a menos de que estemos preparados o tengamos una habilidad especial para lograrlo. ¿Te ha sucedido que de repente te das cuenta de que no sabes lo que necesitas para poder avanzar en un proyecto determinado?
1. Alguien con mentalidad de vencedor siempre está atento a adquirir aquellas habilidades que necesita para lograr los propósitos de Dios en su vida.
2. Los vencedores tienen una visión tan clara que son capaces de saber cuáles habilidades necesitan y, anticipadamente, se preparan. Son personas que no les toma nada por sorpresa o inadvertidos.
3. Inconmovible: tiene que ver con alguien que no lo altera las situaciones, nada lo mueve. Quizás alguien diga que eso es imposible, pero con la ayuda de Dios podemos ser inconmovibles sin que nada nos desestabilice.
4. Cuando fuimos diseñados por Dios, él puso una parte espiritual en nosotros que no puede ser conmovida, sino que siempre está dispuesta. Además, en nuestro interior vive el Espíritu Santo que no puede ser movido por nada.
5. Los que tienen mentalidad de vencedores son inconmovibles, se parecen al monte Sion, jamás serán conmovidos y permanecerán por siempre. Dios te está rodeando como las colinas que rodean a Jerusalén y por siempre lo hará.
