“Para esto fueron llamados, porque Cristo sufrió por ustedes, dándoles ejemplo para que sigan sus pasos” – 1 Pedro 2:21 (NVI). 

Cada persona que lea esto se enfrentará a una tragedia en algún punto de la vida. Tendrás una perdida – una gran pérdida – en tu vida. Nadie puede escaparse de la tragedia. 

Jesús, el hijo de Dios, seguro no lo hizo. 

Jesús no solamente nos dio un modelo de su vida. Él nos dio un modelo para manejar el dolor en su muerte. Él nos demostró qué hacer durante el peor día de tu vida. La Biblia dice en 1 Pedro 2:21, “Para esto fueron llamados, porque Cristo sufrió por ustedes, dándoles ejemplo para que sigan sus pasos”. 

Cinco días antes de la Pascua del 2013, mi hijo menor se suicidó. Fue el peor día de mi vida. Muchas veces me pregunto cómo he podido sobrellevar estos últimos años. 

Miro el ejemplo de Jesús. La respuesta es la Pascua. 

¿Qué fue lo que hizo Jesús durante el peor y más doloroso día de su vida aquí en la tierra? 

1. Él busco a sus amigos. En la noche que Jesús iba a ser arrestado, torturado y ejecutado, la última cosa que hizo fue reunirse con sus amigos. Jesús no pidió discursos o consejos. Él solo pidió su compañía.

La mayoría de las veces nosotros hacemos lo contrario, cuando estamos sufriendo, nos alejamos de todo y todos. ¡Es una tontería hacer eso! Dios nunca quiere que nosotros suframos en soledad. Por eso es tan importante el ser parte de un grupo de estudio o célula, o de una comunidad de creyentes. 

2. Él se acercó a Dios por medio de oración. Tú necesitas amigos en los tiempos difíciles, pero necesitas mucho más a Dios. Dios estará a tu lado cuando nadie más lo esté. 

Jesús se acercó a Dios en el jardín de Getsemaní y, haciendo esto, nos dio un tremendo ejemplo de oración durante los momentos difíciles. Ante todo, reafirma el poder de Dios (ora algo así como “Señor, tú lo puedes todo”). Segundo, expresa tu deseo (“no quiero este dolor”). Tercero, sométete a Su voluntad (“Señor, no hagas lo que yo quiero; haz tu voluntad”). 

Tú no fuiste diseñado para pasar por los momentos difíciles a solas. Cuando lleguen esos momentos –y llegarán– busca a tus amigos y busca a Dios. 

Estarás satisfecho de haberlo hecho.

 Reflexiona sobre esto: 

- ¿Te parece más difícil buscar a Dios o a tus amigos? ¿Por qué?

- ¿Por qué crees que es importante el afirmar el poder de Dios en medio de tiempos difíciles?

- ¿Cómo se puede estar más preparados para los demás cuando lleguen los tiempos difíciles?

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Este devocional ©2016 por Rick Warren. Todos los derechos reservados. Usado con permiso.